Invertir en bienes raíces

Todos nos hemos preguntado alguna vez qué son los bienes raíces y qué tipos existen. En este artículo te contamos cómo funcionan los bienes inmuebles y cómo invertir en ellos. También te estás preguntando ¿Cómo empezar a invertir en bienes raíces? ¡Sigue leyendo!

Los bienes raíces o comúnmente conocidos como bienes inmuebles, son el pavimento o el suelo y todos aquellos elementos adheridos a él.

No sólo se considera bien inmueble a una edificación o construcción interna, sino a todas las cosas que lo rodean y forman parte del conjunto, como por ejemplo vegetación, elementos decorativos o pequeñas intervenciones arquitectónicas. 

Básicamente todos los objetos o estructuras que estén unidos ya sea física o conceptualmente a un inmueble fijo y que no se puedan separar de él sin deteriorarlo en alguna de sus partes o formas.

Los inmuebles por analogía son los que tienen derechos e imperan obligación sobre otros inmuebles, por ejemplo, la hipoteca que surge tras adquirir una vivienda. 

Por otro lado, un bien inmueble por destinación es el que al adquirir o comprar una propiedad, existen objetos, construcciones o estructuras que pertenecen al propietario y se utilizan para la explotación del terreno. 

Por ejemplo, la adquisición de una granja, la propia estructura y todo lo que la sustenta o forma parte de ella entraría en este tipo de inmuebles.

Los bienes inmuebles son aquellos que se han incorporado posteriormente al terreno o a un inmueble principal fijo. 

Si se cohesionan con un inmueble por naturaleza cambia su estado a ser fijo también. Estos inmuebles por naturaleza, se refieren al terreno y al suelo, los cuales estaban ahí desde un inicio antes de cualquier tipo de construcción.

Todos los documentos que formalizan, acreditan y reconocen a un grupo de personas como propietarios de un bien, ya sean de una construcción, elementos u objetos se conocen como bienes inmuebles por representación. 

Mientras que, nos referimos a bienes inmuebles por accesión a todos aquellos que por naturaleza pueden ser desplazados, es decir, elementos movibles que al adherirse o colocarse en una determinada ubicación, pasan a formar parte de la estructura. 

Por ejemplo, ventanas, contenedores o puertas.

Antes de realizar cualquier compra debemos analizar nuestra situación, establecer el presupuesto con el que contamos y tener en cuenta los diversos rasgos que conlleva invertir en unos bienes u en otros.

Es una buena estrategia para incrementar tu propio capital, es uno de los métodos de inversión que menos recursos económicos exige.

Puedes comprar una casa como vivienda principal, habitarla durante un año y luego lanzarla en alquiler. El pago inicial y puntaje de crédito generalmente son cifras más bajas para una residencia principal que para una propiedad.

Comprar una vivienda de gran tamaño o un dúplex, esto te permite alquilar la mitad de la construcción. Pagarás una cifra baja de costo inicial ya que resides ahí y además, la otra parte que alquila la vivienda se estará haciendo cargo de la hipoteca mensual.

Pedir al vendedor que se haga cargo de los costes de cierre que conlleva la transacción de los bienes raíces. Teniendo en consideración que todos los alquileres deben tener un flujo de fondos positivo para hacerse cargo de posibles incidencias.

La situación del mercado del alquiler en el territorio español se encuentra en pleno auge. Tomar la decisión de adquirir un inmueble y alquilarlo posteriormente es una gran oportunidad, ya que los diferentes informes y estadísticas reflejan que el mercado está experimentando un crecimiento continuo. 

Todos estos años atrás el pensamiento de “alquilar es tirar el dinero” ha estado muy presente por gran parte de la población, pero los cambios sociales y económicos que ha experimentado la sociedad estos últimos años, han dado la vuelta a la tortilla y el alquiler es preferencia. 

Los inmuebles son una inversión rentable y óptima con la que se puede ganar grandes cantidades de dinero, independientemente en tiempos difíciles económicamente hablando.